Invertir en una prenda de cuero es elegir una pieza atemporal, elegante y duradera — siempre actual, siempre sofisticada.
Para conservar todas estas cualidades, algunos cuidados básicos son fundamentales.
Recuerda: el cuero legítimo es como una piel, y debe limpiarse e hidratarse con delicadeza.

Cuidados recomendados:
• Limpia solo con un paño seco, limpio y suave.
• Hidrata el exterior con una crema neutra, aplicando con movimientos circulares.
• Guarda la prenda en un lugar seco, ventilado y sin exposición directa al sol.

Qué evitar:
✘ Lavar la prenda
✘ Retorcer o estirar zonas húmedas
✘ Secar al sol o con calor directo
✘ Usar productos químicos
✘ Frotar con fuerza excesiva

Siguiendo estos simples cuidados, tu prenda se mantendrá impecable por muchos años.
Si tienes dudas, no dudes en contactarnos.